En épocas de estrés es bastante usual tener pesadillas. De hecho, últimamente abundan bastante en mis noches e incluso en mis siestas, cuando puedo echarme una siesta.
Lo bueno de las pesadillas es que cuando te despiertas ves que no son reales.
Aunque sueñe con un examen, con un trabajo y cosas que me obsesionan, aunque me despierte igual de nerviosa que en la pesadilla, abro los ojos y veo que no he hecho el trabajo, que no se ha pasado la fecha del examen, que (aún) no he sacado un muy deficiente....
La reflexión de esta mañana ha sido todo lo contrario. Me fui a dormir abatida... no he tenido ninguna pesadilla y cuando he abierto los ojos, por un momento he deseado abrir los ojos y despertarme, pero es que eso es lo que acababa de hacer.
Vaya plan, eh? pues si, hoy vivo en mi pesadilla...
en fin, mañana más.
1 comentario:
A mi me gustaría recordar mas sueño, pero solo recuerdo dos tipos de suño, o me matan o estoy follando y me pasa algo extraño. Casualmente en el primer tipo siempre ocurre que me matan con una katana o una espada... debo estar como una cabra ....
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